Conjunto de chambray pololo de fallera Anna de la Llar del Fil para mujer y niña.  Confeccionados en tejido de batista de algodón, cuenta con una decoración de entredoses y puntillas tipo valenciennes, así como de varias lorzas finas. El pololo tiene una cintura elástica para mayor comodidad y la chambra cuenta con unas cintas laterales para ajustarla así como de unos cómodos tirantes anchos. 

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Es un conjunto de chambra y pololos de indumentaria regional de gran detalle y calidad, perfecta para vestirse tanto de fallera como de de baturra o de huertana, así como de otro tipo de indumentarias regionales.

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Historia de las chambras

La chambra es una sobrecamisa utilizada sobre la ropa interior que fue muy utilizada a finales del siglo XIX y hasta la mitad del XX. Más que una camisa, podemos considerarla como a camiseta interior, tanto en largaría como en soltura, que llevaba mangas. Con el paso de los años, ésta fue entallándose y sus mangas desaparecieron. La chambra en su origen llevaba poco o ningún adorno, pero con la aparición de nuevas fibras de algodón, más delicadas, de mejor calidad y más ligeras, comenzó a incorporar adornados de puntillas tanto en el cuello como en los remates e incluso también con bordados.

Historia de los pololos

Los pololos o calzón, era una prenda interior femenina muy utilizada en los siglos pasados con la función de cubrir las partes íntimas en contacto directo con la piel. Conocida como el “saragüell de dona", fue una prenda muy utilizada durante el siglo XIX. Heredadas de las calzas y precedente a la ropa interior actual, su forma era similar a la de un pantalón corto generalmente bombacho que se utilizaba debajo de las enaguas y las faldas.

Confeccionados normalmente en batista, muselina, hilo, lino o algodón, debían cubrir por debajo de las rodillas y se fijaban, bien fruncido o atados con unas cintas. Estas iban decorados con incrustaciones de puntillas y encajes así como con lorzas.